
viernes, junio 30, 2006

miércoles, junio 28, 2006
CHOCOLATE
NO PODRÉ NUNCA SENTIR EL PERDÓN...
MIS MANOS LACERADAS SIGUEN CAVANDO ENSANGRENTADAS...
MI CABELLO CUBRIENDO EL ROSTRO DEL PASADO...
MI PALADAR ESPERANDO CEREZAS Y CREMA BATIDA...
GRITOS DE LOCURA, GRITOS DE DOLOR.
GRITOS DE INJUSTICIA, GRITOS DEL CORAZÓN.
AMOR DE CHOCOLATE, GRITOS DE RELLENO DE LICOR.
viernes, junio 09, 2006
Masivo Y Bisiesto

Nunca quise nada de eso ciertamente, de lo que la vida trajo a mí en aquel paraje aquella noche nevada, ni el cómo lo trajo. Aunque quizá lo merecía.
Definido apenas anoche como Masivo y Bisiesto, entiendo perfecto quién soy y que debo agregar Nocturno, Nictálope quizá. Frugal sin duda y mientras me queden poderes.
Pero siempre estaré aquí... no esperando, luchando. Pero estaré en el momento que me necesites para salvar al mundo.
jueves, junio 08, 2006
DE PUNTITAS

"En las pequeñas calles intrinsecas de Alberobello la nieve, cuando cae, es mucho más hermosa que en el resto de sitios donde la he visto. Incluso en las montañas", me dice muy seguro de sí mismo.
-¿En qué montañas?- digo yo, algo retador, esceptico.
-En todas por supuesto-.

Me voy, pues yo nunca he visto la nieve, y apenas la imagino como arena de playa, fría y mucho más perecedera. Casi instantanea.
MAÑANA INMUTABLE
Y sin embargo su mirada es linda, plácida, afable.
El problema no es suyo. Es todo mío. Egoístamente mío. Mi mirada es furibunda y arisca hoy. Ayer. Lo será esta noche y quizá hasta pasado mañana.
Al fin baja. En una esquina cruzando de inmediato la calle de forma imprudentísima, sobre todo para quien no ve. Un trayecto más en el que nada ha pasado. Sigo leyendo.
lunes, junio 05, 2006
CARNISALCHICHONERÍA
Cada noche,
cada entrecerrar de mis ojos…
Veo imágenes estáticas,
mencionando mi nombre.
Lloro por lluvia.
Por no tenerte a mi disposición.
Lloro por traidor.
Los espejos porque existen.
Porque blanco es el color de cualquier cuchillo.
Del escabroso placer de una lija.
De los antebrazos.
Suspiro porque el aire un momento
antes de venir
se pierde entre mis venas sectarias.
Luego expira mi cuerpo con mil colores concentrados.
Mi estómago nunca ha comido.
Mis cejas no encuentran el momento preciso.
Se dejan seducir fácilmente.
Cabildean lo que pueden.
Toman nombres peligrosos y
los hacen polvo blanco.
Envuelto en latex,
un órgano expira culpas.
La violencia le sienta bien.
La expectación por importarle a alguien lo estimula.
Es un camaleón.
El hedor enlama paredes.
Hay cucarachas escondidas en mi cuerpo.
Manchas de óxido en el tuyo
colaboran con espejos y alfileres;
en la revolución y los terremotos.
Por lo general no soy yo.
Es un monstruo que vive en el clóset.
Son las garras de la bondad.
Un placebo colorado.
De amargura y esplendor.